Monday, July 1, 2024

Andrew Tate, El Neo Marqués de Sade Idolo de la Juventud de Ultraderecha


En el París del siglo XVIII, en los años previos a la Revolución Francesa, se comienza a escuchar el nombre de Monsieur Donatiene Alphonse François. Donatiene era un aristócrata, hijo de un Conde, un diplomático, y de una dama francesa emparentada con los Borbones, en aquel entonces la dinastía reinante en Francia.

Donatiene estuvo lejos de llevar una infancia idílica, con un padre que cayó en la ruina, y una madre, que abandona el seno familiar para, eventualmente, hacerse monja en un convento de Carmelitas Descalzas.

Donatiene es criado temporalmente por su abuelo, al igual que por una de las amantes de su padre, que pudo haber influenciado sus peculiares ideologías.

De adolescente fue interno en un instituto Jesuita donde recibe una exquisita educación humanística, y donde se rumora, pudo haber sido abusado físicamente por otros compañeros, e incluso superiores.

Donatiene, que hereda el título nobiliario de marqués, tiende a conductas poco ortodoxas, y a pesar de que contrae matrimonio en 1763, entendemos que fue un joven rebelde, mujeriego y con prácticas de índole sexual, menos que aceptables e inusuales.

Como adulto, aprovechó su estatus social para mezclarse en círculos políticos. Adoptaba sin pena alguna, la ideología que más que le convenía, Fue monárquico furibundo y anarquista, y por muy poco, logra escapar la suerte que corrieron los últimos monarcas de Francia, la guillotina.

Hablamos, claro está del Marqués de Sade (pronunciado Sad)

Donatiene de Sade, fue uno de los exponentes del género socio literario conocido como los "Libertinos" que abiertamante criticaban el clericalismo tan arraigado a la Francia de sus días, el eroticismo en la literatura, y, por sobre todo, eran confesos y declarados "antisistema."

Quedémosnos con este concepto que nos ha de servir como nexo a nuestra temática.

Los periplos sexuales del Marqués han sido analizados con detalle a lo largo de los últimos siglos, con varias de sus novelas llevadas al cine, en un boom de cine semi-porno de la década de los 70s, que nos trajo películas como "Emmanuelle" o "La Historia de O," cuyo protagonista, Sir Stephen, está basado en las aventuras y la filosofía de vida de Sade.

Pero hay un detalle, que quiero resaltar en este análisis: la abierta experimentación del marqués con prostitutas y damas venidas a menos de la sociedad de sus tiempos, para crear, a partir de su convivencia e interacción con ellas, su controversial legado tanto filosófico como literario.

Donatiene falleció a los 74 años de edad. En aquellas fechas había estado teniendo un affaire con una adolescente llamada Madelaine, hija de uno de sus empleados.

El marqués de Sade, su personalidad, su peculiar estilo de vida, e incluso su obra intelectual ha sido dificilísima de definir y de entender, porque el marqués Donatiene de Sade, en mi opinión, no lo puso fácil.

En la época del marqués de Sade, no habían redes sociales, claro está. Pero sí había, sobre todo en Francia, un abundante y extraordinario bagaje cultural, entre los cuales se desprende una gran obra que oscila entre la comedia y el drama, "El Misántropo," de Jean-Baptiste Poquelin, que todos conocemos por su nombre artístico: Molière.

Alceste, el protagonista, tranquilamente podría haber sido, incluso inconscientemente, la inspiración para ese personaje--porque no puede ser descrito de otra manera--que Donatiene de Sade adopta como escritor y como un "proto influencer" de los años 1700s.

Alceste, el misántropo, explica que odia a la humanidad porque hay tanta hipocresía, engaño y falsos halagos en el mundo que no puede encontrar un hombre que diga la verdad abiertamente. Afirma que todas las personas deben ser completamente francas y honestas unas con otras.

Alceste es un hombre amargado, irritado, inconforme, vanidoso y poco sutil, pero sabe como utilizar un lenguaje elegante para expresar su omnipotente inconformidad.

Al igual que el marqués, Alceste es un camaleón emocional e ideológico, y desde este punto pido que viajemos al siglo XXI, a nuestra era, para introducir a un personaje--porque no puede ser descrito de otra manera--tan impregnado de las "delicias" de la literatura y filosofía francesa de la época de Sade, que pareciera calcado de este infame seductor que dio nombre al género y la conducta denominada "sadista."

Señoras y señores que entre al escenario Andrew Tate.

Entendamos, por supuesto, qué flaco favor hacemos tanto al Marqués de Sade, como al Alceste de Molière, comparándolo con un personaje como Tate, que ha confesado tener fobia a la lectura, y que, por lo tanto, dudo que conozca los pormenores de una Francia pre-Revolucionaria.

Pero es posible, que nuestro colectivo cultural, tienda a querer reencarnar a un marqués de Sade en la sociedad del nuevo milenio. Un Alceste con arroba que dícese experto en el manejo del bitcoin.

Al igual que Donatiene de Sade, el controversial marqués, Tate tiene un abierto favoritismo por las prostitutas y es quizá uno de los más conocidos proxenetas que existen.

Tate es un avatar creado por su propio ego, e inflado por la reputación que le han dado los usuarios de redes sociales en menos de una década.

Como tantos personajes--porque no puede ser descrito de otro manera--ha presumido de inventarse una historia de orígenes humildes y de pobreza extrema. Nada más lejos de la realidad, puesto que su padre fue un conocido campeón de ajedrez a nivel internacional.

Tate, sólo tiene 37 años de edad, pero es quizá uno de los millennials con más dominio de la opinión pública que existen--y tal vez, de los más peligrosos.

Profesionalmente, se hizo muy conocido practicando el kickboxing, una de las diversas disciplinas de las artes marciales, donde se alzó con varios títulos en muchas competencias tanto en los Estados Unidos como en Inglaterra.

Es importante destacar que Tate tiene doble nacionalidad, y en los últimos años, fijó su residencia en Rumanía, donde goza de gran popularidad, y según sus palabras, está fuertemente vinculado con élites políticas y económicas.

Se podría hacer un tratado de las múltiples, a mi parecer ofensas, de Andrew Tate. Pero hablemos de algunas pocas para que ustedes puedan hacerse una idea del carácter y de sus actividades. O como se dice popularmente, "del elemento."

Hasta el año 2022, la red de trabajadoras de Tate rozaban el centenar. Estas muchachas, queremos creer mayores de edad, tenían como deber crear exhibiciones frente a una cámara de contenido pornográfico. 

Con plataformas con "Only Fans," esto se ha hecho fácil, accesible y desgraciadamente popular.

Las chicas de Tate podían ganar mensualmente hasta $40M mensuales. Este dinero iba directamente a las arcas de Tate.

Las mujeres que más generaban ganancias eran “recompensadas” con la oportunidad de tener encuentros sexuales con su "amo" y con una mísera propina, no más de un 10% de las ganacias que la empleada generaba con su contenido explícito.

Varias, si no todas, estas señoritas, han posado orgullosas en sus redes, mostrando tatuajes que dicen "Property of Andrew Tate" (propiedad de Andrew Tate)

Tate es un perseguido de la justicia, al igual que Sade. Alegadamente, ha sido acusado de tráfico humano, alegato que aún está bajo investigación.

Según Tate, él y su hermano Tristán, consideran Rumanía un paraíso fiscal y sexual, donde pueden vivir una existencia libertina y promiscua sin que les caiga el peso de la ley. Presume de tener vínculos con la peligrosísima mafia rumana, y tiene contacto con varios de sus sicarios.

Se ha paseado por todos los podcasts habidos y por haber, y en ellos, al igual que en redes donde acumula casi una decena de millones de seguidores, es un abanderado de la misoginia y la supremacía del hombre.

Tate ha sido cancelado tanto de Facebook, como de Instagram, y ahora también de Tik Tok. Pero sigue tomando fuerza en la plataforma X de Elon Musk, otro de sus "apóstoles."

Esta especie de Alceste cibernético, para mí es más que evidente, que pertenece a un universo imaginario. 

El Misántropo es un devaneo de Molière, un antisistema con buena labia y buenos ademanes. Tate, nuestro tema de hoy,es también una copia casi al carbón del marqués intelectual que no sólo presumía de buena labia, sino que hacía aspavientos de poseer labios irresistibles.

Andrew Tate se vanagloria de su discurso polarizante. Pero, si lo escuchan, y pido que así lo hagan para que tengan este análisis más presente, no es más que un guión muy bien aderazado. Su mensaje, al igual que el de Alceste, es de una persona inconforme y perennemente de mal humor.

Su indumentaria es la de un moderno marqués, que presume de su musculatura (recuerden que fue atleta profesional) y de tatuajes y joyas pesadas, posiblemente de oro, que realzan su figura y su estatus. En inglés nos referimos a ello como "bling bling."

Andrew Tate no tiene nada de atractivo en mi opinión, pero, afortunadamente, mi educación y mis valores, no me hacen a mí, en lo absoluto, sentir magnetismo por un personaje--porque no puede ser descrito de otra manera--tan despreciable y tan falso.

Pero por qué es imprescindible (al menos) intentar descifrar a este sujeto?

Muy sencillo...porque tiene un alcance mediático y cibernético sin límites. Y porque su audiencia, mayoritariamente, la conforman jovencísimos varones que pueden tener sólamente 12 o 13 años de edad.

Andrew Tate es un "vende lejía" conocido por sus diversos cursos en internet de cómo invertir en bitcoin, y de cómo llegar a ser un confeso y portentoso "macho alfa."

Tate es un abanderado del movimiento del "omegaverso," terminología que coloca a la mujer en una jerarquía de ser sumisa y de buscar hacer vida marital (o convertirse en concubina) de caballeros adinerados y con ambiciones.

En la testa retorcida de Tate el maltrato a las hembras es no sólo un plus, sino una manera infalible de lograr la sumisión emocional de las mismas y la excitación sexual.

No puede extrañarnos, de verdad lo digo, en esa sociedad francesa que va decayendo paulatinamente y que desemboca en la Toma de la Bastilla, pueda gestarse un marqués de Sade, y que éste, a su vez pueda haber sido "premiado" por su indeseable conducta por filósofos y feministas por igual.

Hay quienes han dicho, a lo largo del siglo pasado, que fueron los escritos de Sade, los que pudieron haber inspirado a Nietzsche, Baudelaire y Dostoevsky (válgame Dios!)

Pero, de ser así, poco nos debe extrañar que a una sociedad tan venida a menos, nos hayan llegado, a través de los de siglos, nefastos "seudo influencers" a los que hemos dado la venia para la degradación de nuestra civilización Occidental.

Que tengamos a Tate como un ídolo de masas en nuestro universo mediático no es el problema per sé. Es un síntoma. Una metástasis, como prefiero llamarlo, de este tumor cancerígeno tan inmune a los valores judeo cristianos.

Es también una prueba fehaciente, como ya hemos dicho con anterioridad, de un capitalismo mal estructurado, donde cualquiera tiene acceso a un esquema para enriquecerse con facilidad.

Lo más grave quizá sea que Andrew Tate es una ficha de muchos, muchísimos analistas y activistas del movimiento conservador, que aplauden sus declaraciones por ser irreverentes y por, supuestamente, poner en evidencia, como "El Misántropo," la hipocresía de nuestra sociedad.

Exponentes de los actuales movimientos más ultraderechistas de Estados Unidos, entre ellos rostros tan conocidos como Tucker Carlson, Candace Owens, Jack Posobiec y Alex Jones, le han puesto a Tate y a sus ideas, una grotesca alfombra roja en sus plataformas.

Tate, como parte de su maquiavélico guión, y con el afán, seguramente, de crear hashtags y hacerse notar, ha hecho abiertamente apología del Nazismo, lo cual lo convierte en un deplorable antisemita y amoral.

Pero, vuelvo y repito, Tate es un producto de ficción, y el antídoto a sus declaraciones y su influencia es denunciar sus falacias y tratar por todos los medios posibles de destapar sus fechorías.

Irónicamente, los conservadores se han hecho discípulos de sus sandeces, y son los más progresistas los que se han atrevido a criticarlo y a exponerlo como el charlatán que es.

Y es por eso que me pareció imprescindible conversar sobre este personaje. Una vez más, los conservadores nos estamos equivocando, elevando a los altares a estos avatares tóxicos, pensando que con ello hacemos batalla cultural y destruimos las ideologías woke que tanto nos afectan.

Dado el historial y la extrema imprudencia de lo que se conoce como contenido "red pill," haciendo alusión a la película "The Matrix" donde el protagonista, Nemo, toma la píldora roja para "despertar" a la realidad que lo rodea, sabemos que en un futuro no tan lejano, nos vamos a ir auto destruyendo por nuestra propia falta de juicio y de criterio.

Es absolutamente preocupante que nuestros jóvenes en vez de tener ilusión de estudiar y de trabajar con dedicación, hagan alusión a la filosofía esperpéntica y--literalmente--pornográfica de un Andrew Tate.

Séneca, llamado "El Joven," es a quien se atribuye esta frase tan contundente, y que con la propagación de tan malos exponentes de la moral y la decimación ideológica de nuestros días, se hace más que presente y latente: "Homo homini lupus," "el hombre es el lobo del hombre."

Pero para concluir con optimismo esta oscurantista y poco esperanzadora reflexión, me gustaría dejarlos con una frase de un contemporáneo del marqués de Sade. Quizá, la otra cara de la moneda, en esa espesa decadencia de la Francia del siglo XVIII, Jean Jacques Rousseau:

"La falsedad tiene infinitas combinaciones, pero la verdad tiene solo una forma de ser".

Y en cruzada feroz, en la búsqueda de la verdad y al rescate de nuestra civilización, entre las sombras infernales de la ignorancia y el teatro sociopolítico que nos han montado, hemos de inmolar a todos los personajes antagónicos de esta tragicomedia del Socialismo del siglo XXI.

Personajes, señores, sí, porque no podemos definirlos de otra manera.

Andrew Tate, El Neo Marqués de Sade Idolo de la Juventud de Ultraderecha

En el París del siglo XVIII, en los años previos a la Revolución Francesa, se comienza a escuchar el nombre de Monsieur Donatiene Alphonse F...